Belfast, la ciudad entre dos fuegos

Belfast es la capital del Ulster, Irlanda del Norte. Se puede definir fácilmente como un pueblo entre dos fuegos, dividido entre el barrio protestante, leal a la corona británica, y el distrito Católico. Siempre han estado en la lucha por la independencia y la reunificación de la isla.
A pesar de esta intensa historia, con la gran cantidad de hoteles en Belfast  que hay,es una ciudad maravillosa para visitar: una pequeña Londres en Irlanda; una especie de sucursal del Brit georgiano trasplantado en el extranjero.

Nuestro recorrido comienza por los  alrededores Donegall Square corazón de la ciudad de Belfast y sede del Ayuntamiento, el Palacio Municipal. El Gran Teatro de la Ópera está a poca distancia a pie, junto a la Catedral de St. Anne y al Albert Memorial Clock Tower, la famosa torre del reloj de la ciudad. También sugerimos una visita al Museo del Ulster y a los Jardines Botánicos. Hay mucho más que ver en esta ciudad, pero lo más típico es la visita al barrio católico de Belfast.
En la pared de la sede del Sinn Fien, el antiguo Partido Laborista irlandés destaca el gran mural dedicado a Bobby Sand, el héroe de la lucha por la independencia de Irlanda del Norte, que murió en prisión tras una protesta contra la violencia del  ejército británico.

Dejando a un par de horas la capital del Ulster se puede admirar la belleza natural de Irlanda del Norte. Lo que llama la atención, una vez que se cruza la frontera es la diversidad de las casas entre Irlanda del Sur e Irlanda del Norte. Pronto queda claro que aquí estamos en la zona rica y hay que  recordar también el cambio de moneda: en el Ulster se utiliza, de hecho, la libra; mucho más fuerte que el euro que viene usado en el resto de Irlanda.

Pero el camino sigue hacia el extremo norte y la costa, hasta la Calzada del Gigante, donde un flujo de lava, y el viento provocaron una formación de roca lisa, una geometría nada menos que perfecta. Un espectáculo natural de rara belleza e intensidad.